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miércoles, 7 de octubre de 2009

No cargues de más

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CONTENIDO
- Lecturas del Día
- Primera Lectura
- Salmo
- Santo Evangelio
- El Mensaje de Hoy


LAS LECTURAS DEL DIA

07/10/2009, Miércoles de la 27ª semana de Tiempo Ordinario


PRIMERA LECTURA
Tú te lamentas por el ricino, y yo, ¿no voy a sentir la suerte de Nínive, la gran ciudad?
Lectura de la profecía de Jonás 4, 1-11

Jonás sintió un disgusto enorme y estaba irritado. Oró al Señor en estos términos: -«Señor, ¿no es esto lo que me temía yo en mi tierra? Por eso me adelanté a huir a Tarsis, porque sé que eres compasivo y misericordioso, lento a la cólera y rico en piedad, que te arrepientes de las amenazas. Ahora, Señor, quítame la vida; más vale morir que vivir. » Respondióle el Señor: -«¿Y tienes tú derecho a irritarte?» Jonás había salido de la ciudad, y estaba sentado al oriente. Allí se habla hecho una choza y se sentaba a la sombra, esperando el destíno de la ciudad. Entonces hizo crecer el Señor un ricino, alzándose por encima de Jonás para darle sombra y resguardarle del ardor del sol. Jonás se alegró mucho de aquel ricino. Pero el Señor envió un gusano, cuando el sol salía al día siguiente, el cual dañó al ricino, que se secó. Y, cuando el sol apretaba, envió el Señor un viento solano bochornoso; el sol hería la cabeza de Jonás, haciéndole desfallecer. Deseó Jonás morir, y dijo: -«Más me vale morir que vivir.» Respondió el Señor a Jonás: -«¿Crees que tienes derecho a irritarte por el ricino?» Contestó él: -«Con razón siento un disgusto mortal.» Respondióle el Señor: -«Tú te lamentas por el ricino, que no cultivaste con tu trabajo, y que brota una noche y perece la otra. Y yo, ¿no voy a sentir la suerte de Nínive, la gran ciudad, que habitan más de ciento veinte mil hombres, que no distinguen la derecha de la izquierda, y gran cantidad de ganado?»

Palabra de Dios.



Salmo responsorial Sal 85, 3-4. 5-6. 9-10
R. Tú, Señor, eres lento a la cólera, rico en piedad.

Tú eres mi Dios, piedad de mí, Señor, que a ti te estoy llamando todo el día; alegra el alma de tu siervo, pues levanto mi alma hacia ti. R. Porque tú, Señor, eres bueno y clemente, rico en misericordia con los que te invocan. Señor, escucha mi oración, atiende a la voz de mi súplica. R. Todos los pueblos vendrán a postrarse en tu presencia, Señor; bendecirán tu nombre: «Grande eres tú, y haces maravillas; tú eres el único Dios. » R.



EVANGELIO
Señor, enséñanos a orar
Lectura del santo evangelio según san Lucas 11, 1-4

Una vez que estaba Jesús orando en cierto lugar, cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: -«Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó a sus discípulos.» Él les dijo: -«Cuando oréis decid: "Padre, santificado sea tu nombre, venga tu reino, danos cada día nuestro pan del mañana, perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todo el que nos debe algo, y no nos dejes caer en la tentación." »

Palabra del Señor




EL MENSAJE DE HOY
No cargues de más
Arturo Quirós Lépiz

Cuentan que un hombre caminaba por un larga calle de piedra. Este hombre cargaba un saco con rocas del río para hacer un arreglo en su casa a varios kilómetros. En ese momento un camión le alcanzó y ofreció llevar, pero dado que los asientos de adelante iban ocupados, debería ir en el cajón. Para el hombre no hubo problema en aquel acuerdo y subió.

Quien conducía notó, viendo por el espejo, que aquel hombre a pesar de ir en el cajón del auto, continuaba con su saco a cuestas, y así lo hizo hasta llegar a su casa.

Saben, nosotros nos parecemos al hombre de esta historia. Tenemos cargas, dolores, penas, rencores o malos recuerdos en nuestras vidas. Llega Jesús y nos ofrece ayuda y la aceptamos, pero seguimos cargando aquello a pesar de la ayuda.

Confiamos y no confiamos, creemos pero dudamos, aceptamos pero condicionamos. Dios no tiene límites, y si bien es cierto, parece tonto lo que el hombre de la historia hizo, es lo que muchos hacemos diariamente. Por eso muchos que dicen confiar en Jesús no sienten su carga liviana y no parecen tener descanso. Entrega tus penas a Jesús, y deja de cargarlas en este día.

Su amigo y hermano
Arturo

"Si habueritis fidem,
sicut granum sinapis!"
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Sn Jn. 3:16

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